Me ha defraudado bastante, habitaciĂłn pequeña con armario que parece que te va a caer encima, el baño es estrecho al que le han hecho una media reforma, el agua de la ducha o sale frĂa o caliente, si quieres secador de pelo hay que bajar a buscarlo a recepciĂłn, la tapa del WC es de plĂĄstico malo y estĂĄ prĂĄcticamente suelta. Para aparcar pegado al hotel sĂłlo hay sitio para cuatro coches pequeños, pero siempre hay donde aparcar andando unos metros. El desayuno te lo sirven en la mesa zumo en vaso pequeño de cafĂ©, tostadas con sĂłlo dos barquetinas de mantequilla y mermelada de fresa escasa en un pequeño recipiente, bolleria prĂĄcticamente inexistente consta de dos croisanes pequeñines calientes y dos sobaos no tienen mĂĄs, ni fruta(al menos a nosotros no nos la ofrecieron y estuvimos varios dĂas) ni fiambre alguno, para que te sirvan dicho desayuno ĂĄrmate de paciencia porque te vas a tirar una hora con suerte algo menos. Hicimos las comidas en el hotel, te preguntan si quieres el ticket ( pero señores claro que queremos el ticket es su obligacion entregarlo si no lo queremos ya lo dejaremos en la mesa, una de las veces nos cobraron cosas que no consumimos), la comida es cara para lo que se come todo muy adornado y experimentando en salsas y sabores, señores vamos a Galicia a comer comida tĂpica de la zona, gambas lo mĂĄs normal al ajillo no rebozadas y con una salsa que no era mala era pĂ©sima pagando para encima 10â50âŹpor cinco gambas contadas y sabĂan a amoniaco. Playa enfrente