Por medio de la presente quiero expresar mi profunda insatisfacción con la experiencia vivida durante mi estancia en su hotel.
Durante nuestra estancia, sufrimos el robo de US$110 sustraídos de la mochila de mi esposo dentro de nuestra habitación. Al notar la falta del dinero, acudimos inmediatamente a la recepción para reportar el incidente. El personal nos informó que comunicarían la situación a los jefes de servicio para iniciar el proceso de queja. Sin embargo, pese a insistir en varias ocasiones para conocer el avance del caso, no recibimos ninguna información concreta.
Además, solicitamos los datos de la persona encargada de la limpieza de la habitación durante esos días, así como los nombres completos de la jefa de limpieza y del responsable de atención al cliente, pero se negaron a proporcionarlos, indicando que cualquier queja debía hacerse “a nivel general”. En ningún momento recibimos una disculpa por parte del personal, lo que demuestra una falta total de empatía y profesionalismo.
Este tipo de situaciones son inaceptables en un establecimiento hotelero, ya que los huéspedes confiamos en que nuestras pertenencias estarán seguras y en que el personal actuará con transparencia y respeto. La falta de respuesta y la evasión de responsabilidades por parte de su equipo nos dejan muy decepcionados del servicio.
Espero que tomen las medidas necesarias para investigar lo ocurrido y evitar que otros huéspedes pasen por una situación similar.